El valor de por vida del huésped (GLV) es el ingreso total que un hotel puede esperar de un huésped durante toda la relación. Incluye las reservas de habitaciones, los servicios complementarios y las recomendaciones. El GLV ayuda a los hoteles a medir la rentabilidad de los huéspedes individuales, no solo la rentabilidad de una sola estancia.
GLV ayuda a tomar decisiones sobre las relaciones con los huéspedes, los programas de fidelización y el marketing personalizado. Al comprender qué segmentos de huéspedes tienen el mayor valor de por vida, los hoteles pueden adaptar su comunicación, ofrecer las mejoras adecuadas e invertir más para retener a los huéspedes.
También se puede usar con PMS y CRM para ayudar al personal a hacer un seguimiento de la frecuencia con la que los clientes se quedan, cuánto gastan y cómo interactúan con la empresa a través de diferentes canales.
• Crea ofertas personalizadas para los huéspedes antes de su llegada y vende más durante su estancia.
• Alentar a las personas a suscribirse a los programas de fidelización.
• Mantente en contacto con los clientes una vez que se hayan ido y envíales ofertas especiales.
• Garantizar la coherencia del servicio para fomentar la repetición de las estancias.
El punto clave que hay que entender es que, a menudo, es mejor para una empresa aumentar el valor de los huéspedes que ya figuran en sus libros que tratar de atraer a otros nuevos. Incluso un pequeño aumento en retención de huéspedes puede afectar significativamente a los ingresos totales.